una historia diferente espero les agrade como escribo y esta historia sea de su agrado
Besando la sangre de tus labios
Dicen aquí
en Yakensburgo reside
un vampiro, pero
eso son solo
viejos rumores que viajan entre
las personas, quizá
un mito para
asustar a los
niños, aunque muchos aseguran haberlo
visto o haber
sido mordidos por
el vampiro pero
ninguno de ellos
es capaz de
recordar lo que
les sucedió.
-te das
prisa no quiero
que te agarre
la noche
-si papa-
mi padre siempre
preocupándose, ¿realmente creerá
en todos esos
rumores?
Ignorando la
advertencia de mi
padre me quede
platicando con el
panadero, para cuando
iba de regreso
a casa ya
había anochecido, de
seguro para cuando
regrese me dará
otro de sus
sermones, mis pensamientos
se distraen al notar en la obscuridad
algo, se movía
entre los techos,
levante aún más
mi vista intentado divisar mejor aquel objeto, así me topé
con dos ojos
color carmesí, tan hermosos,
tan diferentes, tan temibles, como tonta me quedo observándolos, al
mismo tiempo que
ellos me observaban
a mí, …¡desaparecieron!, ¿Dónde
podría estar?, me sobresaltó al
darme cuenta que se
encontraba detrás de mí, ¿Cómo
le había hecho
para llegar hasta
mi tan rápido?,
mis ojos temblaban,
mis labios temblaban, yo temblaba,
estaba echa un
lio pero no
podía apartar la
vista, no podía
moverme, con su
mano derecha tomo mi
barbilla y se
acercó aún más,
estaba tan cerca
bastante cerca, jamás, nunca
nadie había estado
tan cerca mío,
me volví a
desconcertar cuando sentí
mi cuello húmedo,
el lamio una, dos,
tres veces mi
cuello, era excitante, no,
no podía pensar
ese tipo de
cosas, no debía,
rodeada de tantos
modales en un
pueblo en que
la lujuria no
cabe, la pasión, son
conocidos como deseos sucios, actos ejecutados
por el mismo
satanás, personas que se
han rendido a él y renunciado a la
decencia, mujeres de
cuatro letras, pecadores,
palabras que solo
te acompañarán en
caso de pensar
de esta forma,
de sentir lo
que siento en
este momento, mi
corazón se detuvo
al sentir ese perforante dolor
en mi cuello…
-A
caso tu eres…- incapaz de continuar hablando por el
intenso dolor, sólo quedan mis pensamientos, el
vampiro del que
se habla tanto,
los rumores sobre él, todo era verdad,
no logro concebir que me esté sucediendo esto, puedo sentir mi sangre
deslizándose por mi cuello,
visualizo como estas van manchando mi
vestido, justo antes de perder la
conciencia digo.-esto es perfectamente
placentero.
Mis
ojos volvieron abrirse- ¿Dónde estoy?
-hija
que alegría que despertaras,
te
encontramos tirada en la calle, ¿Qué sucedió anoche?, perdón primero que nada
¿Cómo te encuentras?
-yo…
yo me siento bien, papá
estoy bien
-
te dejo descansar, ¿quieres comer algo?
-ammm……si
por favor
-entonces
en un momento regreso
¿Qué
había sucedido anoche?, regresaba….yo…cuando… ¡rojo!, ¡ojos rojos!, ¡un vampiro!, ¡en verdad
existen!, casi reprimiendo mis gritos
de asombro, ya recuerdo.
Toque mi cuello
para cerciorar que las
marcas estuvieran ahí, no
me alcanzaba a ver así que
me pare de
mi cama y me acerque al tocador
para encontrar dos marcas,
en verdad todo había
sucedido ayer, de
verdad el existía, ¿Por qué no tendré
miedo?, ¿Por qué
siento esto en
mi pecho?, ¿Qué es…?...yo….yo……yo…..yo lo quiero volver a ver.
Tocan
a la puerta- hija traigo la comida-
mi padre entra
y me observa
contento- me alegra verte
de pie significa que te encuentras bien, ven
siéntate y come algo
para que no recaigas
-gracias
papá- comencé a comer
y me di cuenta que mi papá no
me dejaba de ver-
¿sucede algo?
-no nada solo…que…bueno ¿Qué paso anoche?
Viene
la imagen de sus ojos, sus
dientes perforando mi piel….
-nada,
bueno….- no se mentir, y menos
a mi padre, pero…
¿Por qué no soy capaz de
decirle la verdad?- no lo recuerdo
-si
recuerdas algo me
dices
-¿Por
qué la curiosidad?
-solo
me preocupas, come- se retira, pude sentir un
aire bastante pesado en aquella
conversación ¿Qué habrá sucedido con él?
continuando esta historia
continuando esta historia
Estoy
parada frente a mi ventana observando en cada
techo, tratando de encontrarlo, decidí irme
a recostar, pero deje
la ventana abierta con la esperanza de que el fuera entrar
por ella.
Dicen
que una vez
que te muerde
un vampiro, la persona
que fue mordida queda atrapada dentro de una especie de trance en
el cual busca ser otra
vez mordida, una y otra vez, me
pregunto si estaré
bajo su trance.
12:00
a.m.
Continuaba
dormida cuando sentí
alguien más en mi habitación abrí mis
ojos de poco
en poco, para descubrir que mi deseo se había
hecho realidad, ese par
de ojos observándome una vez
mas tan de cerca, se acercó
aún más tomando
uno de mis mechones y oliéndolo.
-jamás
pensé que nos
volveríamos a ver-
quede atónita al escuchar
esa profunda, dulce y
deliciosa voz, que
el pronunciara esas palabras para mi
provocaban sonrojarme bastante.
-¿Por
qué nunca llegaste?-
no entendía, pero al
recitar esa oración
sus ojos mostraron una tristeza y soledad
inmensa.
Se
acercó hasta mi cuello, esta vez
del lado que se encontraba sano, comenzó
a lamerme como la
otra vez, y otra vez era
placentero, ese dolor,
igual al de la noche
anterior, y antes
de que pudiera
preguntar quién era deposito un beso
en mis labios dejando un poco
de mi propia sangre.
En
el desayuno no podía
dejar de pensar
en lo sucedido en la noche anterior y la anterior a esa.
-dejaste
la ventana abierta
-¡eh!-
mi papá me
había bajado de mi nube demasiado rápido- ah me dio un poco
de calor
-puede
hacerte daño, no
lo
hagas- parecía bastante molesto
<<<<<<<<continua nya>>>>>>>>>>>><<<<<<<este es el final nya>>>>>>>>>
Noche
tras noche el
venía a mi habitación y tomaba
de mi sangre,
esto se ha vuelto un poco
adictivo, con cada noche a
mi cuerpo le
costaba un poco
más moverse, papá se
la pasaba trayéndome de comer, ya
no salía, estaba
bastante débil para
hacerlo, ¿sería debido
a las mordidas?, no solo
tenía mordidas en el cuello sino en
mis brazos también, aunque yo
había dejado cada noche la
ventana abierta, yo le había permitido arrancarme la vida
en cada sorbo.
Esta
noche no fui capaz de
esperarlo despierta.
-mi
hija ha desaparecido- gritaba un padre por las
calles
-aquí
estarás bien- decía un hombre de
apariencia bastante joven, ojos color
carmín, resaltando en todo
su aspecto sombrío, tan obscuro, como su
cabello, su ropa
todo de el emanaba una lejana
soledad y melancolía.
-Hace
mucho el casi
se la lleva, preferí
que muriera en mis manos a
que ellos estuvieran juntos, ahora lo quiere
hacer con mi hija, no le permitiré, la he cuidado, escondido tanto tiempo de el para que ahora todos estos
años los pierda como la
última vez.
-¡matémoslo!
-¡si
devolvámosle todo lo
que ha hecho!- una horda
enfurecida se acercaba
preparada para atacar
a una casa
en especial, un dueño
descubierto, no, hace
mucho que esa
casa no tenía
dueño, pero si
la residía alguien, la residía
una persona
que paseaba por las
noches de techo en
techo buscando….buscando…¿Qué buscaría?....sangre…..alimento ……..o…….una chica. Las
personas empezaron a llenar la casa, hasta encontrar una dulce, hermosa joven de cabellos
largos, rubios, recostada en un ataúd, una
chica durmiente con apariencia tan pálida.
-todo
este tiempo ha sido
tu hija
-no,
no es ella
-nos
lo ocultaste y permitiste que callera el pecado
en nuestro pueblo- entre varios hombres
detuvieron al padre
de la hija
a la que se le acaba de incrustar un estaca
en el corazón.
Cuando
el habitante de la casa regreso solo pudo observar
que sus intentos
por mantener con vida a su dulce
joven fueron en vano,
tocando su mejilla
derramo unas cuantas
lágrimas.
-otra
vez te he perdido- decía para sí
mismo- esta vez no te soltare-
continuaba hablando el vampiro mientras mordía una
de sus muñecas
y en un beso depositaba
su sangre dentro
de la boca
de su doncella.
Abrí
mis ojos y una vez
más él estaba
conmigo, una mirada
que mostraba preocupación lo acompañaba,
lo abrace, tan fuerte…
-creí
que no te volvería a ver…pero…yo
no soy la persona
que piensas.
-¿qué?-
se mostraba desconcertado
-aun
estando dormida pude escuchar a mi padre, el asesino a mi mamá….tu amada, para que no huyeran juntos, yo…yo soy su hija- lo iba perder
pero no podía
engañarlo.
-son
tan iguales, pero…estoy seguro… de que no estoy equivocado-
mis ojos se
abrieron de la sorpresa y se llenaron de lágrimas, lo abrace aún más
fuerte, él se retiró para besarme,
nuestro beso fue
interrumpido por el ruido de afuera-
una ejecución- dijo él
mientras me asomaba por una
ventana, era mi papá, me
di cuenta que el me observaba, y antes
de que fuera horcado alcanzo a mascullar
dos palabras “lo siento”, sentía tristeza, felicidad, e ira todo a la vez,
la ausencia de mi
madre fue su culpa,
aun así pude
sentir un aire
de alivio tras su
trágica ejecución, abrace aún
más a mi amado, mi
papá sabía que yo estaba junto a
él y aunque
no lo comprendería
yo había heredado algo más que
el aspecto de mi madre si no su amor por él
y a pesar
de hoy no estar viva
me siento viva por
primera vez, tan
solo al estar
a su lado.
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